Netflix está tan fuertemente asociada al streaming que a veces se nos olvida que, en su origen, era una empresa de alquiler de DVDs por correo. Un videoclub remoto.

Ahora Netflix es un gigante que todo lo devora. Extinguió a los videoclubes, casi ha extinguido a los formatos físicos, y quien saber lo que pasará con los canales tradicionales de televisión.

Por eso quizá te sorprenda saber que en Estados Unidos Netflix aún tiene 3 millones de suscriptores que alquilan DVDs. Es una cifra importante, pero insignificante frente a los 130 millones de usuarios de streaming en todo el mundo. ¿Por qué Netflix aún mantiene su negocio de alquiler de DVD?

Netflix nació en 1997 cuando uno de sus fundadores, Reed Hastings, tuvo que pagar 40 dólares porque se había retrasado en la devolución de Apollo 13 al videoclub. Así que decidió estrenar un servicio de alquiler de películas en DVD a través del correo, que no tenía plazos de devolución.

El cliente diseña una lista de películas que quiere alquilar, y las recibe una a una por correo. Puede quedárselas el tiempo que quiera pero para obtener películas nuevas debe devolver, también por correo, alguna de las que tiene. En 1999 eliminó el pago por copia y adoptó un modelo de suscripción mensual. En 2005 ya disponía de más de 30.000 títulos y enviaba un millón de DVDs al día.

En 2007 había enviado por correo 1.000 millones de DVDs. Pero este sistema no se podía exportar a otros países por sus limitados servicios de correos, así que ese mismo año Netflix comenzó a ofrecer el alquiler de películas en streaming a través de Internet. 

¿Aún sigues viendo DVDs y Blu-rays? Los tienes todos en oferta en Amazon

Diez años después, Netflix aún mantiene tres millones de suscriptores que alquilan DVDs. ¿Por qué no cancela el negocio? Sencillamente, porque le es rentable. Solo en el último cuarto ganó 53 millones de dólares con el servicio de alquiler. Sus usuarios pagan una cuota más alta que el streaming.

Sin embargo, cada cuatrimestre pierde una media de casi 200.000 suscriptores de este servicio, así que a este ritmo se quedará sin ellos en 2022, aunque dejará de ser rentable mucho antes.

El alquiler de DVDs tiene los días contados para Netflix. Pese a quién pese, es un servicio con fecha de caducidad.