Hasta ahora, la única forma de adelgazar y perder grasa es seguir una alimentación equilibrada y hacer ejercicio. Sin embargo, esto pronto podría cambiar o al menos hacerse menos cuesta arriba, y todo gracias a científicos españoles.

No, no hablamos de la pastilla para perder peso, sino de una investigación realizada por el Centro Superior de Investigaciones Cardiovasculares. Este estudio puede haber dado con la clave para quemar grasa más rápido.

Estos investigadores han averiguado como funciona la llamada grasa buena, también conocida como grasa parda. A diferencia de la grasa blanca, la responsable de la obesidad, esta variedad parda se acumula sólo en pequeñas cantidades y puede ayudar a regular el peso.

Como han descubierto en experimentos con ratones, la grasa parda se encarga de activar una proteína, la P38, que hace que el organismo queme grasa blanca para regular la temperatura corporal.

La clave es que en los ratones que no tienen la P38 Alfa -una variante de esta proteína- parece no haber obesidad. Directamente convierten la grasa en parda y la queman para generar calor, en lugar de almacenarla como grasa blanca y calorías extra.

El objetivo del estudio realizado por el CSIC es poder convertir la grasa blanca en grasa buena, controlando así los riesgos de sufrir sobrepeso y enfermedades cardiovasculares, una de las primeras causas de muerte en el mundo, especialmente en países desarrollados.

Aún falta mucho para lograr este objetivo. De hecho será necesario hacer más y más extensas investigaciones sobre el funcionamiento de ambos tipos de tejido adiposo, no sólo en animales sino en humanos.